¿Cuántas veces has intentado tomar control sobre tus finanzas personales? ¿Te has ilusionado al ver crecer tu presupuesto, pero, repentinamente, quedas de nuevo en cero? Deja atrás las experiencias del pasado, aquí te enseñaremos a romper este círculo vicioso paso a paso. No tienes que ser un experto en finanzas personales o administración, para aprender a manejar tu presupuesto solo necesitas objetivos claros y disciplina.

Todo lo que necesitas saber sobre finanzas personales lo resumimos en una ruta de siete pasos, muy sencilla, que será el punto de partida para mejorar tu vida financiera. Si la pones en práctica, y sigues estos consejos, en poco tiempo tu salario mensual dejará de ser tu único recurso económico disponible, y empezarás ahorrar para tu futuro.

Eso sí, algunas etapas tomarán más tiempo que otras. No te desesperes si sientes que estás tomando meses para avanzar al siguiente paso, cualquier meta financiera requiere paciencia y constancia. Lo más importante es que no te detengas.

Toma nota, guarda este enlace, o haz capturas de pantalla, porque seguro revisarás esta guía una y otra vez:

Mejora tus finanzas personales en 7 pasos

En la siguiente ruta encontrarás siete etapas en las que podrás ir avanzando poco a poco, a tu ritmo. Parecen muy sencillos, pero son realmente poderosos. Si aprendes esta ruta y la pones en práctica, seguro mejorarán tus hábitos financieros y tu calidad de vida. Te lo decimos por experiencia. Ahora sí, te presentamos la ruta para alcanzar tu libertad financiera:

  1. Ahorra y controla tus gastos
  2. Haz aportes complementarios a tu pensión
  3. Paga tu deuda con la tasa de interés más alta
  4. Crea un fondo de emergencia
  5. Invierte tus ahorros de pensión
  6. Paga tu deuda con la tasa de interés moderada
  7. Haz realidad tus sueños

1. Ahorra y controla tus gastos

Cuando te propones alcanzar una meta, dar el primer paso, será siempre lo más difícil. Lo mismo pasa cuando queremos ahorrar, y nos ilusionamos pensando lo que haríamos con ese dinero. Tan pronto llegan nuestros ingresos a la cuenta, empezamos a gastar y gastar hasta quedar sin saldo disponible, y luego, tenemos que dar un paso al costado sobre la meta inicial. Aplazamos nuestro propósito de ahorro hasta que “ganemos más dinero", porque parece que lo que tenemos no es suficiente.

Cuando hablamos sobre finanzas personales, muchas personas se abruman al no saber por dónde empezar. Aunque tienen un trabajo, dependen exclusivamente de su pago mensual para cubrir todos sus gastos durante 30 días. Por supuesto, entendemos lo que significa. Pero hay que empezar de alguna manera. Ahorrar sólo 10 mil pesos semanales te ayudará a ahorrar más de 500 mil pesos en el primer año.

Seguir esta ruta para mejorar tus finanzas personales es un buen inicio. Pero, si quieres un plan de verdad, el primer paso será crear tu presupuesto. La idea es que empieces a identificar cuánto ganas y gastas en un plazo de tiempo específico, hasta que logres entender y analizar cómo se mueven tus ingresos. Te sugerimos realizar este ejercicio mes a mes sin pasar por alto ningún detalle.

Supongamos que ganas un promedio de 2 millones de pesos al mes, el presupuesto te ayudará a definir cómo gastar o ahorrar cada peso.

La mejor manera de ahorrar es gastar menos durante el mes

Empieza con un objetivo claro, específico y realista. Poco a poco descubrirás que sí es posible ahorrar ¿Quieres reducir tus gastos? Empieza por evaluar el costo de tu vivienda. Compartir un apartamento con amigos, o seguir viviendo con tus padres, es una muy buena opción cuando necesitas ahorrar de manera urgente.

Comer fuera de casa, pagar un plan de datos, tener suscripciones de televisión o cubrir reparaciones y gastos de tu vehículo, implica gastar mucho dinero. Recuerda que tienes la opción de cocinar en casa, cancelar suscripciones que no utilices, o buscar proveedores de servicios más económicos.

Quizá te demores un poco en detectar estos gastos innecesarios, pero el ejercicio es necesario para empezar a ahorrar. En caso de no poder reducir tus gastos actuales, la mejor opción es buscar ingresos extra.

Eso sí, olvídate de usar tarjetas de crédito mientras ajustas tu presupuesto financiero. De lo contrario, estarías pagando intereses solo por conservar un cupo de crédito.

El objetivo de esta primera etapa es que logres acumular al menos 1 millón de pesos en tu cuenta de ahorros, antes de avanzar a la siguiente.

2. Haz aportes complementarios a tu pensión

Quizás pase un mes, o incluso, un par de años en completar tu primer ahorro, lo más importante es que llegues hasta aquí. El siguiente paso será aprovechar al máximo cualquier programa de compensación que ofrezca tu empresa.

Algunas empresas suelen ofrecer beneficios de ahorro a sus empleados como el patrocinio de fondos de pensión con aportes complementarios. Como su nombre lo indica, son abonos adicionales al aporte obligatorio que pagan cada mes. Es decir, tú y la empresa donde trabajas, se comprometen a realizar aportes adicionales a tu fondo de pensión, con el propósito de incrementar el capital de ahorro.

Imagina que te encuentras un billete de $50.000 en el suelo, ¿te detienes a recogerlo? ¡Por supuesto! Lo mismo sucede cuando aprovechas este tipo de oportunidades con tu empleador. No descartes la posibilidad de incrementar tu ahorro de pensión.

Eso sí, antes de hacer aportes complementarios a tu fondo de pensión, debes estar seguro de que tu empleador incluye esta opción en su plan de beneficios para los trabajadores, y preguntar sus porcentajes de cobertura. Así podrás calcular la cantidad exacta que debes aportar.

Recuerda, el área de Recursos Humanos es la encargada de asesorarte durante este proceso. Antes de asumir que tu empleador no cuenta con este tipo de beneficios o que no cumples con los requisitos necesarios para realizar aportes complementarios, ¡pregunta!

Otra excelente opción es aportar a pensiones voluntarias, sobre todo cuando de ahorro e inversión se trata. Ya que al hacerlo, no solo estarás creando un depósito para el futuro sino haciendo que el dinero trabaje para ti. Además, podrías disponer de ese dinero para otros propósitos diferentes a tu jubilación y disfrutar de beneficios tributarios. Entérate de todo lo relacionado a esta alternativa en nuestro blog El ABC de las pensiones voluntarias.

3. Paga tu deuda con la tasa de interés más alta

Bien, si ya tienes tu ahorro personal, y estás realizando aportes complementarios a tu fondo de pensión, ha llegado el momento de pagar tus deudas de alto interés, es decir, aquellas con una tasa superior al 8% anual. Aunque suene exagerado, las tarjetas de crédito y los préstamos son el mayor enemigo del ahorro.

Es fundamental que pagues tus deudas de alto interés para evitar que el saldo final incremente cada vez más. La mayoría de las tarjetas de crédito manejan tasas de interés entre el 15% y el 25% anual. Esto significa que tu deuda puede crecer y crecer sin que gastes un solo peso. Por esto la mejor opción es disponer de cada ingreso extra que recibas, para asegurar los aportes complementarios a tu pensión, y saldar tus deudas de alto interés.

Si tienes un crédito educativo no subvencionado, debes incluirlo en esta categoría de deudas de alto interés. Por el contrario, las hipotecas no se tienen en cuenta durante esta etapa, ya que suelen ser deudas numerosas a largo plazo, y te impiden ahorrar para tu jubilación durante años.

Si no estás seguro de conocer el tipo de tasa de interés que estás pagando por tus préstamos, consulta con tu entidad financiera.

Una sugerencia adicional, al priorizar el pago de tus deudas de alto interés, es importante que continúes pagando la cuota mínima de tus otras deudas con intereses moderados, para no afectar tu calificación crediticia. Liberarse de este tipo de préstamos con alta tasa de interés es un proceso que puede tardar varios años, y eso está bien. Recuerda que la libertad financiera es un viaje a largo plazo.

Conoce más estrategias para salir de deudas aquí y alcanza la tranquilidad que necesitas.

4. Crea un fondo de emergencia

¡Lo lograste! Has pagado tus deudas de alto interés, te has ahorrado una gran cantidad de dinero. Ahora empieza lo más emocionante: ¡crear tu propio capital de ingresos!

Si ya estás libre de deudas, o por lo menos han disminuido considerablemente, el siguiente paso será crear tu fondo de ahorro para emergencias. Este dinero se reservará únicamente para casos imprevistos como emergencias médicas, ser despedido de tu trabajo u otra calamidad. La idea es que tengas liquidez ante este tipo de situaciones y puedas recuperarte económicamente lo antes posible.

También podrás utilizar este dinero en caso de que necesites reparar tu vehículo por un daño repentino, pagar facturas atrasadas, realizar compras necesarias de último momento. Lo ideal sería que logres ahorrar lo suficiente como para cubrir 3 meses de tus gastos básicos.

Tendrás la opción de ahorrar tu dinero en efectivo y guardarlo en un lugar seguro de casa, sin embargo, te sugerimos depositarlo en una cuenta corriente o de ahorros gratuita y sin comisiones para evitar robos, pérdidas.

Sigue esta Guía para crear tu fondo de emergencia y acércate al bienestar financiero que tanto sueñas.

5. Invierte tus ahorros de pensión

Ya tienes tu ahorro de 3 meses, ¡respira con tranquilidad! Has llegado a la mitad de camino.

Ahora es el momento de invertir dicha reserva de dinero. Como te lo dijimos en el punto 2, una de las mejores alternativas de ahorro e inversión es la pensión voluntaria, así que puedes depositar tu dinero en este mecanismo para hacer que tu dinero trabaje para ti.

6. Paga tus deudas con tasas de interés moderada

Estás cerca de ser un máster en finanzas personales, ¡pero aún no has terminado! Todavía tienes deudas de interés moderado pendientes por pagar, así que manos a la obra.

Ya pagaste tu deuda de alto interés, así que ya sabes cómo hacer el ejercicio.  Esta deuda de interés moderado puede incluir préstamos personales, créditos educativos subvencionados, entre otros. 

Así que si quieres liberarte de cualquier tipo de deuda, este es el momento oportuno para priorizar el pago de todas las que tienes acumuladas (incluso las de bajo interés). Una vez salgas de todas tus deudas, ¡estarás listo(a)  para dar el siguiente paso!

También puede leer: Cómo salir de deudas, te damos las estrategias

7. Haz realidad tus sueños

Si has llegado hasta aquí, ¡eres ganador(a)! Estás a punto de lograr tu bienestar financiero. Te propusiste el ambicioso objetivo de organizar tu vida financiera, elaboraste un plan y lo cumpliste.

Ahora piensa en tus sueños más grandes, como ahorrar para la matrícula universitaria de tus hijos, pagar la hipoteca antes de tiempo, comprar el carro de tus sueños. Y, ¿qué tal si planeas tus próximas vacaciones?

Ya sabes cuáles son los pasos para mejorar tu economía, pero aún puedes aprender más con nuestro Curso de Planeación Financiera y Finanzas Personales que puedes hacer completamente gratis, por tiempo limitado. ¡Inícialo hoy mismo! 

Recuerda que si tienes dudas, puedes escribirlas en los comentarios o a través de nuestras redes sociales, nos vemos en una próxima oportunidad.